El pasado 19 y 20 de abril los alumnos de cuarto de primaria del CEIP Reino de Aragón disfrutaron de una videoconferencia con el parque rural de la Anaga en Tenerife gracias a Israel, técnico auxiliar del Cabildo de Tenerife que trabaja en dicho parque.
La charla con Israel nos sirvió para descubrir nuevos aspectos sobre los árboles y reafirmar nuestro deseo de cuidar y respetar la biodiversidad de nuestro planeta empezando por los lugares que tenemos más cercanos.
Tras estudiar durante varios meses de forma multisensorial sobre las plantas y realizar una visita en el entorno más cercano, nuestro galacho de La Alfranca, nos hemos adentrado también en el aprendizaje sobre los paisajes y las diferencias en los diferentes lugares de nuestro país según su clima, relieve, etcétera.
Este curso está siendo muy importante para nosotros ya que estamos desarrollando nuestras competencias y trabajando sobre los objetivos del desarrollo sostenible a través de estas y otras experiencias como el proyecto de embajadores por la biodiversidad y el huerto.
Un curso más, buscamos proyectos que permitan al alumnado de nuestro centro aprender de forma experiencial, multisensorial y, sobre todo, con un impacto positivo en el entorno que les rodea. Además, seguimos avanzando en nuestro compromiso con los Objetivos del Desarrollo Sostenible. Por ello, este curso, los alumnos de cuarto se han convertido en Embajadores de la Biodiversidad.
El Centro de Investigación y Tecnología Agroalimentaria de Aragón (CITA) promueve este proyecto con el objetivo de “conservar el pasado para que desde el presente podamos mejorar el futuro”. Así pues, además de adquirir conocimientos sobre el área de ciencias naturales (plantas), desarrollamos competencias clave de las ciencias sociales (el paso del tiempo) y valores éticos fundamentales mientras nos implicamos en una investigación científica.
Todo comenzó a principios de curso cuando recibimos las semillas con las que íbamos a trabajar. Se trata de recursos fitogenéticos que están en desuso o bien están siendo sustituidos por otros. Concretamente recibimos habas y bisaltos que hemos estado cuidando.
En primer lugar, procedimos a conocer su origen espacial y temporal remontándonos a la Prehistoria y épocas clásicas y recorriendo con ellas incluso el Nuevo Mundo (conectando con el bloque de contenidos de historia y geografía).
Después, preparamos el terreno y sembramos las semillas. Pero, como es toda una investigación científica, tuvimos que anotar en nuestro cuaderno de campo muchos datos (la localización de la parcela -para lo cual hablamos de las coordenadas geográficas-, localidad y provincia, variedad de las semillas…).
Durante mucho tiempo, fuimos al huerto a regar, limpiar y vigilar el crecimiento de nuestras plantas hasta que, a finales del primer trimestre, comenzamos a ver tallos y hojas. Hemos aumentado nuestra sensibilidad y la responsabilidad al tener que acudir al huerto semanalmente a realizar estas tareas.
Durante el segundo trimestre, hemos proseguido con nuestros cuidados (poniendo tutores a los bisaltos que iban creciendo rápidamente) mientras en ciencias y science estudiamos las plantas (aunque ya habíamos aprendido mucho de forma práctica).
Para nuestra alegría, el ciclo de la vida de la planta continúa y nuestras habas están repletas de flores por lo que hemos empezado a tomar muchos datos sobre sus nudos basales, foliolo, inflorescencias…y un montón de vocabulario nuevo que nos explican las guías didácticas del CITA.
Los bisaltos también han comenzado a florecer y esperamos pronto poder realizar el resto de mediciones referidas a las vainas.
Además, dedicamos una jornada a mostrar y explicar el huerto y el proyecto a nuestros compañeros de primero de primaria que también están estudiando las plantas.
Nos convertimos en tutores del huerto repasando con ellos lo aprendido, enseñándoles a sembrar y acompañándoles en sus primeros pasos como hortelanos.
Ahora, un día a la semana vamos juntos al huerto a regar y observar la MAGIA DE LA NATURALEZA.
